POR DANILO CRUZ PICHARDO.- El presidente Luis Abinader, Luciano Díaz Morfa e Hipólito Mejía, ministro de Defensa y expresidente de la República respectivamente, mantienen un silencio sospechoso con respecto a una serie de acontecimientos ocurridos en país con ribetes de terrorismo. ¿Y ese silencio?
La población demanda informaciones concretas del espionaje contra Yeni Berenice Reynoso, el corte de las luces de la pista del Aeropuerto Internacional de las Américas, el daño de cinco equipos de la CAASD, los 32 pasajeros varados en dos cabinas del Teleférico de Puerto Plata, entre otros hechos no menos graves y que han ocupado las portadas de los diarios nacionales y han copado las redes sociales.
El informe de “cortocircuito” en los cables que dan luz a la pista del principal aeropuerto del país, ofrecido por el Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria y de la Aviación Civil, nadie lo cree.
Es que si partimos que el accidente o cortocircuito es real entonces los oficiales del CESAC deben responder a las siguientes preguntas: ¿Por qué no entraron de inmediato las luces de emergencia? ¿También se dañaron? ¿Por qué las cámaras de seguridad estaban fuera de servicio en ese momento? ¿Se dañaron también?
Sobre el caso se designó una comisión investigadora del DNI, pero ¿dónde está el informe? El informe no acaba de llegar y se descubre un espionaje en contra de la procuradora Yeni Berenice Reynoso y un coronel al servicio del Ministerio Público.
Se detuvo a un segundo teniente y a un cabo, ambos del A2 de la Fuerza Aérea Dominicana, y le encuentran datos comprometedores tanto sobre la seguridad de la magistrada como del alto oficial.
Es ahí cuando se delata al coronel retirado Pepe Goico como la persona que autorizó el espionaje. ¿Y en calidad de qué Pepe Goico da órdenes a militares activos? Ese es un caso tan grave como para que el señor Goico esté preso en estos momentos, pero el ministro de Defensa ni siquiera ha dicho “esta boca es mía”.
¿Qué diablos está pasando en la República Dominicana que ninguna autoridad competente se atreve a hablar? El presidente de la República, por respeto a la población, debió exponer causas sobre estos actos de terror.
Pero también el expresidente Mejía, un hombre locuaz, que habla hasta por los codos, guarda un silencio extraño, a pesar de ser el jefe político del general Luciano Díaz Morfa y del tremendo Pepe Goico.
